
Al recordar El hijo de la novia, Campanella evocó a su familia
Dijo que todas las frases de la protagonista son de su madre
"El hijo de la novia es la historia de mis padres", comentó el director de cine Juan José Campanella, en referencia a la película que dirigió, que tuvo 1.800.000 espectadores en la Argentina y fue nominada al Oscar como mejor película extranjera.
Confesó que al plantear la idea, hubo quienes le dijeron "esto no lo va a vernadie " , pero Adrián Suar leyó la historia y le dijo: "Creo que si la movemos muy bien, podemos salir hechos". Y luego, "el boca a boca" del público que la comentaba le dio una repercusión que la hizo un éxito de taquilla.
Campanella mantuvo un diálogo distendido y amable con Pablo Sirvén, secretario de Redacción de LA NACION, en el Centro de Experimentación del Teatro Colón, dentro del ciclo adn CULTURA presenta, organizado por LA NACION y el grupo Zurich.
El cineasta contó que sus padres no estaban casados por la Iglesia, y que su padre, a los 85 años, le dijo a él que quería hacerlo "para empezar un ciclo nuevo", cuando su madre estaba en un geriátrico, con mal de Alzheimer.
Contó que las frases que dice Norma Aleandro en la película "son todas de mamá". Y narró cómo cuando ya no reconocía a las personas, su madre conectaba con algunas frases. Así, en el geriátrico, alguien preguntó por la enfermera: "¿Dónde está Rosario?". Y su madre contestó: "En Santa Fe".
En cine, Campanella dirigió también El mismo amor, la misma lluvia y Luna de Avellaneda. En TV dirigió Culpables, Vientos de agua y Cuentos cardinales (dos especiales que se vieron hace poco por Telefé). En EE.UU. dirigió en TV capítulos de las series La ley y el orden y Dr. House. Confesó que ahora le cuesta ir tres semanas a Estados Unidos a filmar una serie, porque tiene un bebe de siete meses. Y dijo que rodará en la Argentina una nueva película en el segundo semestre de 2008.
¿Cuál es el punto de partida para una película?, le preguntó Sirvén, y él señaló una idea que se plasma en un guión. El guión de El hijo de la novia tuvo nueve reescrituras, comentó. "Y en Luna de Avellaneda paramos la filmación seis meses, porque no estábamos contentos con el guión."